21 DE DICIEMBRE DE 2015

[ARCHIVO] Presidenta Bachelet en Cumbre del Mercosur: “Tenemos metas comunes que podemos alcanzar con voluntad y trabajando unidos”

En su discurso, la Mandataria destacó los alcances del bloque en la política y economía regional.

“Están por cumplirse 20 años desde que Chile y el MERCOSUR suscribieron su acuerdo de complementación económica. En 1996 fuimos el primer país asociado al MERCOSUR. Desde entonces mucho ha cambiado, y para bien diríamos nosotros, en nuestra relación con este bloque, siempre marcada por el diálogo político y la construcción de un consenso sobre la relevancia de los procesos de integración”, señaló la Presidenta Michelle Bachelet durante su intervención en la XLIX Cumbre de Jefas y Jefes de Estados Partes del Mercosur y Estados Asociados.

En este contexto, la Mandataria destacó el rol del “Mercosur político” para el desarrollo regional de políticas públicas en defensa de la democracia, los derechos humanos, el desarrollo social, las migraciones y la valoración de las culturas originarias.

Asimismo, resaltó que “el ‘Mercosur económico y comercial’ ha tenido un impacto positivo, en Sudamérica y –por cierto- en Chile. Piensen ustedes que el 48% de la inversión exterior de mi país –estoy hablando de un monto que supera los 40 mil millones de dólares-, está en países del Mercosur”.

En su discurso, la Jefa de Estado, señaló que el bloque es el cuarto socio comercial de Chile, y representa un destino muy importante para nuestra exportación de manufacturas o bienes con valor agregado: en 2014 significó más de siete mil millones de dólares, la cuarta parte de la exportación chilena en el mundo, y para la venta de servicios, que ascendió en el mismo año a mil ochocientos millones de dólares.

Además, la Jefa de Estado, nombró otros avances: la habilitación de pasos fronterizos, el establecimiento de preferencias otorgadas a las mercaderías provenientes de zonas francas, el acuerdo sobre el comercio de servicios, la constitución del comité de la micro, pequeña y mediana empresa, la suscripción del convenio de cooperación aduanera y, recientemente, la simplificación de las reglas de origen específicas.

“En todos estos ámbitos, el Mercosur tiene logros que mostrar, pero también hay muchos asuntos pendientes en los que tenemos que seguir trabajando”, comentó, y subrayó que: “Mi país ha impulsado, desde que llegamos al Gobierno en el mes de marzo, el diálogo entre la Alianza del Pacífico y el Mercosur, y lo vamos a seguir haciendo, con decisión y energía. Y hemos dicho con claridad que nunca hemos visto la Alianza del Pacífico como la espalda a los países del Atlántico, que creemos que, por el contrario, tenemos que buscar la sinergia y las posibilidades de trabajar en conjunto”.

Del mismo modo, agregó que “entendemos que en la región hay distintos modelos para avanzar hacia el desarrollo, todos legítimos. Entendemos las diferencias políticas, institucionales y de organización económica. Sin embargo, a pesar de ello creemos que es posible, y creemos que es indispensable, avanzar hacia la convergencia y creación de sinergias entre estos dos mecanismos de integración, especialmente en aquellas materias que no involucren temas arancelarios”.

La máxima autoridad nacional enfatizó que “tenemos metas comunes que podemos alcanzar con voluntad y trabajando unidos. Me refiero, por ejemplo, a las ventanillas únicas; a la facilitación del comercio y cooperación aduanera; a la certificación electrónica; a la movilidad de personas; y a las becas para estudiantes”.

En esta línea, anunció que el próximo año Chile asumirá la presidencia Pro Tempore de la Alianza del Pacífico y “desde ahí vamos a continuar impulsando una mayor cercanía con el Mercosur. Es una cuestión estratégica” y agregó que “nos permite mejorar, no solo desde el punto de vista de nuestras potencialidades sociales, económicas, nuestras distintas responsabilidades, si no como tantas veces hemos discutido, mejorar nuestra voz y que sea escuchada, es decir mejorar nuestra posición ante la comunidad internacional, con más cohesión y capacidad de negociación global. Después de todo, en la actual coyuntura mundial son las regiones las que negocian y necesitamos fortalecer la nuestra. ¡No nos podemos quedar atrás!”.

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