Como sociedad hemos logrado metas que eran necesarias para que esto ocurriera, como tener una cobertura de vacunación en la población mayor de 18 años que supera el 90% para el esquema primario y el 88% para las dosis de refuerzo. Además, tenemos una baja tasa de contagios, menos fallecidos y personas hospitalizadas, una población altamente vacunada y un clima que mejora y nos permite una ventilación más adecuada.
El uso de mascarilla seguirá siendo obligatorio en los establecimientos de salud y altamente recomendada en lugares con aglomeraciones en personas que presenten síntomas respiratorios, centros de larga estadía y en medios de transporte públicos y privados.
Así como la mascarilla sigue siendo obligatoria en recintos de salud para quienes consultan o asisten a ellos y los protocolos de infecciones asociadas a la atención en salud (IAAS), para el personal sanitario también se mantiene su uso.
Las mascarillas son altamente efectivas para evitar los contagios. Las personas que las utilizan tienen un 66% menos de probabilidades de contagiarse de COVID-19. Esa es una de las principales lecciones que hemos aprendido en estos casi tres años de pandemia, especialmente en los grupos de riesgo, en personas con patologías de base o personas con sintomatología como una barrera de protección para otros.
Su uso también reduce el riesgo de contraer otras enfermedades causadas por virus respiratorios como la influenza. Es por eso que seguimos recomendando su uso, con particular énfasis para personas con síntomas respiratorios, que estén en lugares de alta aglomeración, en visitas a centros de larga estadía y quienes usen medios de transportes colectivos públicos o privados.
Recomendamos el uso de la mascarilla en el transporte público por considerarse un espacio de aglomeración y de potenciales contagios. Consideramos que la población ya tiene conocimiento de las medidas de autocuidado para esta enfermedad y existen buenos niveles de vacunación que sustentan este ajuste.
De acuerdo a las modificaciones al protocolo sanitario para establecimientos educacionales del Ministerio de Educación, el uso de mascarillas ya no será obligatorio en educación parvularia, básica ni media, ni en ninguna modalidad del sistema educativo. La decisión de utilizarla al interior de las salas de clases es únicamente de cada estudiante y apoderado/a.
Instamos a que las personas sean responsables en su toma de decisión de acuerdo a lo aprendido en estos años de pandemia.
Sí. El plan Seguimos Cuidándonos Paso a Paso fue elaborado para poder enfrentar diferentes contextos epidemiológicos según sea necesario, desde un escenario de restricción hasta uno de apertura acorde a las condiciones sanitarias que existan. Por lo tanto, se pueden retrotraer las medidas si el escenario epidemiológico así lo requiere.
Actualmente, contar con un esquema primario y dos dosis de refuerzo muestran un escenario de inmunidad eficaz en la población. La vacuna Covid-19, que es bivalente, será parte del Programa Nacional de Inmunización (PNI) y se aplicará, al igual que la influenza, anualmente en un inicio a los grupos de riesgos. En un principio no estará disponible para la venta a todo público, pero esperamos que en el futuro ello se dé.
Al revés, es precisamente porque contamos con altos niveles de vacunación en nuestra población objetivo que podemos terminar con el uso del Pase de Movilidad. Actualmente, contamos con más del 94% de la población inoculada con las dosis primarias, además en mayores de 18 años. Con el primer refuerzo llegamos al 93% y 82% para el segundo refuerzo. No obstante, como aún contamos con un porcentaje de población rezagada (que no se ha vacunado) reforzaremos nuestras campañas de difusión para avanzar en su inoculación. La vacunación no ha terminado y se seguirá impulsando, particularmente entre los grupos rezagados y de riesgo. Como hemos explicado, avanzar a esta etapa y manejo de la pandemia ha sido posible principalmente gracias a la vacunación y es una capa de protección que la mayoría de la población ha entendido como fundamental para protegerse.
Esperamos que la población siga actuando con responsabilidad como lo ha hecho hasta ahora para continuar con la baja de contagios que hemos visto hasta la fecha. El actual escenario ha permitido que la indicación de aislamiento para los casos positivos de COVID-19, pase de 7 a 5 días desde el inicio de síntomas o desde la toma del test en caso de ser asintomático.
La mascarilla ya no será una medida sanitaria obligatoria, por lo que estos recintos no deberían exigirla. No obstante, esperamos que si las personas presentan algún síntoma no concurran a estos espacios de mucha afluencia de público.
Se seguirán manteniendo las capacidades de procesamiento de PCR, seguiremos incrementando el acceso al testeo, a través de la estrategia de Antígeno en 3 Pasos que lanzamos recientemente, y que contempla la venta de los tests de antígeno a un costo accesible, además de una plataforma de autorreporte para que las personas puedan consignar su estado si es que tienen un resultado positivo de COVID-19. Asimismo, se seguirá manteniendo la disponibilidad de test de antígeno con acceso universal y gratuito en la Atención Primaria de Salud, mientras que la Búsqueda Activa de Casos se mantendrá operativa según lo vayan disponiendo las autoridades sanitarias nacionales y regionales.
La Alerta Sanitaria se mantendrá hasta el 31 de diciembre ya que nos permite adoptar medidas tan útiles y necesarias como el reforzamiento de la red sanitaria pública y privada, la vigilancia de pacientes con Insuficiencia Respiratoria Aguda (IRA) y también la Investigación epidemiológica particularmente enfocadas en el COVID-19.
Si una persona se autorreporta positiva, un profesional clínico deberá contactar al usuario para obtener su información personal, chequear su estado clínico, entregar recomendaciones sanitarias y preguntar si requiere licencia médica o acudir a una Residencia Sanitaria.
Si el usuario requiere licencia médica, se le agendará una hora para teleatención, en donde se le pedirá que muestre su carnet de identidad, el folio del test y su test de antígeno, para luego tramitar el documento. A quienes no requieran licencia también se les ofrecerá una teleconsulta.
En cualquier caso, si durante la entrevista se pesquisan síntomas de alerta evidentes como dificultad respiratoria u otro signo de alarma, se derivará de manera inmediata al servicio de urgencia o se solicitará apoyo al 131.
En cuanto se reporten los casos, las seremis investigarán los brotes según los criterios de evaluación del riesgo epidemiológico, lo que se informará a nivel local. No se seguirá cada caso en particular dado que la trazabilidad individual con ómicron y sus variantes en circulación no es factible.
Claro que sí. Las convocatorias siguen llamando a los rezagados para ponerse al día, incluyendo a la población infantil, quienes podrán completar su esquema de 4 dosis.