5 DE DICIEMBRE DE 2016

[ARCHIVO] Presidenta inauguró conferencia internacional “Productividad y Crecimiento Inclusivo”

“Sin equidad e inclusión, nuestro desarrollo está destinado a tener pies de barro; corre el peligro de ser efímero o ilusorio”, dijo la mandataria en la conferencia organizada por el Ministerio de Economía, el Banco Interamericano del Desarrollo y la OCDE.

Esta mañana la Mandataria, Michelle Bachelet, inauguró la conferencia internacional “Productividad y Crecimiento inclusivo”, organizado por el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo, el Banco Interamericano del Desarrollo y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), y que contó con la presencia de ministros vinculados a temas productivos de Latinoamérica y expertos internacionales para discutir los desafíos del área en Chile y el resto de la región.

En su discurso, la Gobernante afirmó que “la correcta interpretación que hagamos de las nuevas exigencias, debe ser el primer paso para pasar a la acción. Es decir, hay que saber combinar un buen diagnóstico, con una buena capacidad de reacción”.

En este sentido, añadió que “en estos tiempos, la lucidez no es suficiente; se debe también ser capaz de movilizar y tener voluntad para sobrellevar duras resistencias, porque en muchos casos corresponde hacer cambios estructurales y culturales que tomarán mucho tiempo, pero lo que está claro es que la magnitud de los cambios no debe impedirnos empezar cuanto antes”.

La Presidenta explicó que “nuestras economías necesitan cuanto antes dejar atrás nuestra excesiva dependencia de la exportación de materias primas, muchas veces monoproducciones y, rara vez, con real valor agregado. Nuestra fragilidad en innovación, en creación de valor, la rigidez de nuestra estructura económica, nos deja mayormente expuestos a los ciclos de precios”.

Además, resaltó que “sin equidad e inclusión, nuestro desarrollo está destinado a tener pies de barro; corre el peligro de ser efímero o ilusorio. Y la historia presente se ha encargado de recordar lo que debiera ser una evidencia: alcanzar el desarrollo, es alcanzar un nivel de bienestar que es experimentado en forma equitativa”.

Asimismo, comentó que el libre comercio ha sido esencial en el desarrollo económico en Chile, pero que generó sectores rezagados “de los cuales había que hacerse cargo, compensarlos y buscar cómo ellos también podían sumarse al desarrollo. Y creo que es lo que ha sucedido en muchas partes del mundo, que se ha demostrado que lo que nosotros postulábamos siempre es efectivamente así”.

En este contexto destacó los principios que han guiado su gobierno y en qué se tradujeron: “Hicimos una reforma tributaria; estamos trabajando en una Constitución que vuelva a unir a los chilenos, y pusimos en marcha una reforma educacional integral, que busca mejorar acceso pero sobre todo calidad desde la primera infancia hasta la educación superior. Nuestros principios también se han traducido en la puesta en marcha y casi total cumplimiento de una agenda de energía que ha permitido dinamizar el mercado. Finalmente, nuestros principios se han traducido también en la materialización de una Agenda de Productividad, Innovación y Crecimiento, que se vio reforzada por la decisión que tomamos hace un año –como aquí ha sido recordado- de declarar el año 2016 como el Año de la Productividad. Conscientes, como ustedes entenderán que la productividad no va a dar un salto gigantesco en un año, pero que era como para colocar con fuerza el énfasis que queríamos darle a nuestra agenda económica”.

Al finalizar sus palabras, la Mandataria señaló que “las políticas sectoriales no pueden andar por vías separadas, basta pensar en la educación, la infraestructura o los polos de innovación. Que las regiones deben ser actores preponderantes en la definición de estrategias productivas; que los financiamientos deben sumarse en torno a objetivos comunes, por ejemplo en el caso de industrias o zonas rezagadas. Y algo no menor: que toda productividad como inclusión sean dimensiones relevadas en la discusión pública”.