9 DE DICIEMBRE DE 2015

Ministra de Salud: “Esta acusación en mi contra, es infundada e improcedente”

En el marco de la acusación constitucional presentada en su contra, la ministra de Salud, Carmen Castillo, intervino ante la Cámara de Diputados previo a la argumentación de su abogado Javier Couso.

Palabras de la Ministra de Salud ante la Cámara de Diputados:

“En primer lugar, saludo a la Cámara de Diputados y aprovecho esta oportunidad, en que la salud pública vuelve a estar en el centro de sus preocupaciones, para compartir con ustedes la mirada que tenemos los trabajadores de la Salud, cuando vemos que los avances, a veces, son más lentos de lo que quisiéramos.

Quiero que sepan que esta labor, a la que he dedicado toda mi vida, la estamos haciendo con todo nuestro esfuerzo y que ninguna maniobra política nos podrá distraer de nuestra misión y de lo que me ha encomendado la Presidenta.

Nuestro desafío es reducir las desigualdades en Salud, mejorar la calidad de los servicios, avanzar en prevención de las enfermedades más recurrentes y, al mismo tiempo, hacer frente a los retos del envejecimiento de nuestra población.

En los últimos 25 años ha mejorado la calidad de vida de los chilenos y chilenas y se han elevado los estándares con que nuestros ciudadanos miden las prestaciones que reciben del Estado. Vivimos tiempos difíciles en Salud, que algunos llaman crisis, con el ánimo de crear una desesperanza crónica y de alimentarla continuamente de malas noticias.

Yo me cuento entre los que vemos en esta situación una gran oportunidad para mejorar y un desafío que la vida buena nos regala para, con seriedad, servir a Chile y su gente.

En estos meses como Ministra, he trabajado por disminuir las inequidades, fortalecer la Salud pública y favorecer el ejercicio de derechos en Salud para los habitantes de nuestro país. Y lo seguiré haciendo, recorriendo Chile, escuchando a nuestra gente, visitando a los trabajadores de la Salud, observando la situación de nuestros hospitales, centros de salud y obras en construcción, supervisando el cumplimiento del programa de Gobierno y promoviendo el buen trato en el sector.

Esta acusación en mi contra ha sido un nuevo desafío, pero estoy tranquila. Confío en los sólidos argumentos para rechazarla y en la racionalidad de este procedimiento. Tengo la tranquilidad de no haber infringido nunca la Constitución ni las leyes. Tampoco he dejado las leyes sin ejecución. Muy por el contrario, he dado fiel cumplimiento a todas las obligaciones que como Ministra tengo.

Esta acusación en mi contra, es infundada e improcedente, por lo mismo, haré valer la denominada “cuestión previa”. Mi defensa indicará las razones de fondo para desechar cada uno de los capítulos entablados en mi contra. Una acusación constitucional es una herramienta en extremo severa y excepcional. Por lo mismo, debe reservarse para los casos para los cuales fue prevista en la Constitución.