12 DE ENERO DE 2016

[ARCHIVO] Galería: 8 testimonios de estudiantes beneficiados por el PACE

651 estudiantes del Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior ya fueron aceptados en las universidades adscritas. Un grupo de ellos desayunó esta mañana con la Presidenta de la República, quien señaló "la gratuidad ya está aquí".

El PACE es un programa de acompañamiento y preparación para estudiantes de la educación media cuyo objetivo es el ingreso a una de las cinco universidades adscritas con las que comenzó el proyecto, en 2014: la de Antofagasta, Católica del Norte, Federico Santa María, de Santiago de Chile y Católica de Temuco.

En el proceso se detectan vocaciones, refuerzan conocimientos, fortalecen aptitudes y generan las herramientas socioemocionales que les permitan a los jóvenes acceder y permanecer en la educación superior.

En un desayuno con algunos integrantes de la primera generación PACE, la Presidenta Bachelet subrayó que “en la educación superior, nosotros hemos echado a andar un sistema equitativo que no excluya a jóvenes talentosos por el lugar de Chile donde vivan, por su origen o la capacidad de pago de sus familias”.

En 2015, el PACE aumentó su cobertura a 356 recintos educacionales de 292 comunas, de los cuales el 95,5% son públicos. Asimismo, las Instituciones de Educación Superior (IES) se ampliaron a 27 universidades, un Centro de Formación Técnica y un Instituto Profesional, para lo cual contó con un presupuesto de M$ 6.103.756.

Estos son los testimonios de ocho de los 651 estudiantes beneficiados del programa PACE:

“Me matriculé ayer para estudiar Educación general básica. Desde chica que he querido ser profesora, me motivé pensando que hay que alentar a los jóvenes a que vayan a la universidad porque no ven que su futuro pueda ser algo más. Pienso que, así como yo, deben haber personas que quieren más, que quieren avanzar y seguir y ser más que sus papás, más que uno mismo. Cuando me llamaron pensé en todo mi esfuerzo, en todo lo que hicieron mis papás, en todo el apoyo que me han dado de todas partes rindió frutos“.

“Llamaron a mi casa y dijeron “buenas tardes, lo llamo del Mineduc”, ahí supe que era algo importante. Era para avisarme que había quedado en mi primera opción, Ingeniería Civil en la Federico Santa María, en Valparaíso. Fue mucha la emoción, le conté al tiro a mi mamá, a mis amigos y profesores de básica. Soy el primero de mi familia en entrar a la Universidad y eso es un orgullo para mí. Lo que me gustó del PACE es que es un programa inclusivo, por ejemplo las reuniones se hacían con padres, apoderados y el colegio. Eso me hizo sentir que nos tomaban en cuenta. Con esto estoy logrando uno de mis sueños: poder entrar a la universidad

“El acompañamiento en esas clases fue súper bueno, me enseñaron lenguaje, matemática; me enseñaron a hablar sin tener vergüenza, a cómo tomar las cosas malas y volverlas en algo positivo, en tener varios planes para el futuro. Cuando me llamaron yo gritaba como loca, mis papás me abrazaban y decían que estaban muy orgullosos de mí y que sabían que yo iba a lograr algo. Nadie de mi familia terminó cuarto medio y que yo haya quedado le dio esperanzas también a mis primos: si ella pudo, por qué yo no. Ahora ellos también quieren entrar a la universidad y aprender más”

Cuando me dieron la noticia que iba a entrar a la u, quedé muy feliz. Elegí Ingeniería civil en informática. Cuando recibí la noticia no lo creía, quedé en shock. Mi mamá llegó hasta octavo no más, de mis hermanos soy el primero que entra a la universidad. Tengo una tía, la hermana de mi papá, que estudió en la universidad, en Colombia, ella es mi mayor inspiración para seguir adelante”.

“Cuando me llamaron quedé sorprendido, siempre soñé con esto y ahora que tengo esta oportunidad voy a aprovecharla al máximo. Toda mi familia me felicitó, mi mamá se puso a llorar. Nunca pensó que iba a haber un universitario en la familia, porque no teníamos los recursos. Estoy contentísimo por ser chileno, porque no creo que en otros países tengan esta oportunidad”.

“Mi experiencia PACE fue muy esforzada, venía de Rancagua a Santiago, todos los sábados. Soy el primer hijo en entrar a la universidad, mi hermano mayor no tuvo la oportunidad porque mi familia no tenía los recursos, por eso cuando salí de octavo mis papás me dijeron que tenía que entrar a un liceo industrial. Eso significó un desaliento para mí, pero se transformó en alegría cuando supe que existía este programa. Quedé en la USACH, en Ingeniería en ejecución mecánica, lo que quería estudiar. Ahí voy a matricularme y a cumplir mi sueño“.

“Ayer me fui a matricular en Auditoría en la USACH. No puedo decir que el proceso del PACE haya sido fácil. Fueron muchos sacrificios, pero es una oportunidad fantástica, no tenemos que pagar nada, gracias infinitas a los que hicieron posible este proyecto. Vivo con mi abuela, ella se ha hecho cargo de mí desde que soy chica y estaba muy esperanzada de que pudiera entrar a la universidad, soy la primera de mi familia y más encima gratis, ¡quién lo iba a pensar!“.

“Voy a ingresar a la carrera de Licenciatura en Química en la USACH.  No creí que iba a llegar tan lejos, pero siento que todo esto lo hice gracias a mi mamá y también esto es un regalo para ella, por lo que ha hecho por mí todos estos años. Personalmente el PACE me pareció maravilloso, porque hacen un acompañamiento completo. No sólo te dan la oportunidad de entrar a la universidad, sino también las herramientas para que te vaya bien“.

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